El universo de los videojuegos y el streaming están a punto de realizar un nuevo «salto de fe». La adaptación de acción real de Netflix basada en la icónica franquicia de Ubisoft, Assassin’s Creed, sigue tomando forma y acaba de sumar un talento de peso pesado detrás de las cámaras.
Según ha revelado Variety, el cineasta sueco Johan Renck, aclamado mundialmente por dirigir la exitosa miniserie de HBO, Chernobyl (trabajo que le valió un premio Emmy), ha sido el elegido para dirigir esta nueva aventura histórica y de ciencia ficción.
Un elenco que promete
La noticia del director llega poco después de que la producción comenzara a revelar las caras que darán vida a esta guerra secreta. El elenco principal estará encabezado por Toby Wallace (Euphoria) y Lola Petticrew (Say Nothing), quienes llevarán el peso protagónico de la historia. A ellos se unen como regulares Zachary Hart (Slow Horses) y Laura Marcus (Death by Lightning).
¿Qué podemos esperar de la historia?
Si bien los detalles específicos de la trama se mantienen bajo siete llaves —muy al estilo de la Orden—, la sinopsis oficial nos sitúa en el terreno familiar de la saga: una guerra secreta entre dos facciones oscuras. Una busca controlar el futuro de la humanidad mediante la manipulación, mientras que la otra lucha incansablemente por preservar el libre albedrío. Fiel al ADN de la franquicia, la serie seguirá a sus personajes a través de eventos históricos cruciales que forjarán el destino de la humanidad.
La serie está en manos de los showrunners y creadores Roberto Patino y David Wiener, siendo el primer gran proyecto desarrollado bajo el acuerdo que Netflix y Ubisoft firmaron en 2020.
El historial de Johan Renck
La elección de Renck eleva las expectativas del proyecto. Además de su magistral trabajo en Chernobyl, su currículum es un sueño para cualquier fan de la cultura pop, habiendo dirigido episodios de Breaking Bad, The Walking Dead, Vikings y Halt and Catch Fire.
Renck no es ajeno a Netflix; ya colaboró con la plataforma en Bloodline y recientemente en la película de ciencia ficción Spaceman (2024), protagonizada por Adam Sandler. Curiosamente, el director confesó el año pasado que tras el éxito de Chernobyl estuvo a punto de retirarse para abrir un restaurante en Brooklyn, pero el llamado del cine (y ahora del Credo) fue más fuerte.
Con la franquicia de videojuegos más viva que nunca tras el lanzamiento de Assassin’s Creed: Shadows este 2025 y más de 230 millones de copias vendidas en su historia, la vara está alta. ¿Podrá esta serie romper la maldición de las adaptaciones y superar a la película de 2016? Con Renck al mando, las probabilidades están a nuestro favor.