Bits al Grito de Guerra. Capitulo 2: El Reinado de la Gran N.
La gran moda de las maquinas arcade en occidente, repercutirían rápidamente a todo el mundo, especialmente en Japón, donde este nueva forma de entretenimiento tendría un gran éxito, impulsando a compañías locales a incursionar en este nuevo mercado, siendo en esta época donde se crearon alguno de los clásicos más importantes de la historia de los videojuegos.
Fue así que una compañía dedicada a hacer juguetes y barajas de juego llamada Nintendo, inspirados por la Magnavox y los juegos de arcade como Pong, vieron un gran futuro en estas tecnologías, por lo que apostaron por estas nuevas formas de entretenimiento y tras ya haber experimentado con un par de arcades propias de gran éxito como Donkey Kong, en 1983 lanzan en Japón su consola la Nintendo Family Computer y tras recibir un gran éxito comercial, Nintendo decide aventurarse al mercado occidental, siendo en 1986, tras una restructuración de diseño y nombre de la consola, se lanza en Norte América y Europa el Nintendo Enterteiment System. Gracias a los novedosos videojuegos que estaban disponibles para esta consola como Super Mario Bros y The Legend of Zelda, Nintendo gano rápidamente, no sólo un gran renombre, sino que también el liderato en las listas de ventas por los siguientes años, dejando muy atrás a todos sus competidores. Pero esta hegemonía se vio en peligro, cuando una compañía también dedicada al entretenimiento electrónico, entro en escena a librar una de las batallas más épicas en la historia de los videojuegos en contra de “La Gran N”. Tras la explosión del entretenimiento electrónico en Japón, varias compañías se aventuraron a tratar de ser parte de este mercado y tal como fue el caso de Nintendo, otra compañía llamada SEGA hizo lo propio, siendo así que para el año de 1983 lanzaron también al mercado su propia consola, la Mark III, con la cual trataron de competir contra los 8 bits de Nintendo, pero la los grandes títulos disponibles y el reconocimiento que ya había ganado la consola de Nintendo, llevaron al primer intento de SEGA por incursionar en el mundo de las consolas, a un panorama sin pena ni gloria. En 1986 SEGA dio un nuevo intento al remodelar y reestructurar se vieja consola Mark III, naciendo así lo que se llamaría SEGA Master System y aunque esta nueva consola no alcanzo la popularidad ni las ventas de Nintendo, fue el primer aviso de que SEGA se convertirían en un serio competidor para Nintendo.
En el año de 1988, SEGA daría su primer golpe de autoridad, lanzando al mercado su nueva consola, SEGA MegaDrive, la cual tenía el doble de potencia de la NES y aunque en Japón el éxito de la consola no fue nada espectacular, fue hasta el lanzamiento de esta consola en América y Europa bajo el nombre de SEGA Genesis, que por primera vez un competidor le daría real pelea a Nintendo. Con una agresiva campaña de publicidad en contra de Nintendo y títulos un poco más maduros, apelando a un público más adolescente, poco a poco SEGA iría ganando más adepto e igualando a Nintendo en ventas, incluso llegando a ser la consola más vendida en regiones como Europa. Tras la SEGA Genesis, Nintendo tuvo que dar su siguiente paso y este fue, por fin saltar a los 16 bits con la Super Famicom, conocida en América y Europa como Super Nintendo y lanzada al mercado en 1990. Fue a partir de este año que gracias a la pelea encarnizada entre las consolas de 16 bits, veríamos durante esa época algunos de los videojuegos más icónicos de ambas plataformas y el nacimiento de importantes franquicias que quedarían en la historia del gaming dando comienzo a lo que se llamaría la época dorada de los videojuegos.
Durante los siguientes años la competencia entre Nintendo y SEGA fue ardua, pero cuando SEGA estaba por superar por fin el reinado de “La Gran N”, cometió un gran error, enfocar todas sus estrategias en mejorar su consola, dándole más prioridad a la potencia de la consola que a la calidad de sus juegos, fue así que con la salida del periférico de 32X para la SEGA Genesis que aumentaba la capacidad de la consola a 32 bits, pero no fue lo suficiente para ganar la batalla contra los 16 bits y los grandísimos juegos que el Super Nintendo ofrecía al público, por lo que poco a poco SEGA se fue quedando rezagado, por lo que un nuevo intento, ahora al intentar dar batalla por los 64 bits, lanzando en 1994 la SEGA Saturn, fueron insuficientes ya que esta consola fue arrasada por el Nintendo 64 y que a la postre le daría la victoria a Nintendo, que pesé a todos los esfuerzos de SEGA, se quedaría con el reinado de los videojuegos.
Pero el Reinado de Nintendo no sería para siempre, pues si bien, estando en la cima y demostrado su poderío derrotando contundentemente a SEGA, no esperaban a un nuevo competidor, que con una “Estación de Juegos” alzaba la mano, para reclamar el trono de los videojuegos y tratar de una vez por todas derrocar “El Reinado de La Gran N”.